La limpieza de cristales es una de las tareas más indispensables para el espacio en el que nos encontramos. Pues sin importar si es el hogar, la escuela o el trabajo esta actividad es necesaria para permitir la entrada idónea de iluminación aprovechando la luz solar de una mejor manera, ahorrando energía eléctrica y facilitando la realización de ciertas actividades como la escritura o la lectura.
Sin embargo, muchas personas utilizan un método incorrecto para realizarlo.
LOS ERRORES MÁS COMUNES A LA HORA DE LIMPIAR CRISTALES SON:
- No utilizar el producto adecuado
Si no utilizas un producto cuyo objetivo sea limpiar cristales no obtendrás los resultados esperados, podrás manchar el cristal o simplemente esparcirás aún más la suciedad.
2. Limpieza incorrecta
La manera correcta de limpiar es de arriba hacia abajo, con esta acción evitarás que las gotas resbalen y vuelvas a manchar la parte que ya habías secado. Así mismo, previamente hay que retirar la suciedad de vidrios y marcos, posteriormente pasas a su lavado.
3. Aplicar el producto directamente
A excepción de que el modo de uso lo especifique, jamás debes de aplicar el producto directamente, la forma ideal es rociarlo sobre un paño y después limpiar el cristal en cuestión.
4. No utilizar el paño adecuado
Muchas veces no ocupamos el paño adecuado para la limpieza dejando demasiada pelusa sobre la superficie, rayándolos o manchándolos solamente.
5. Limpiarlos en un mal horario
Evita a toda costa que el sol pegue directamente sobre el cristal que estás por limpiar, pues, lo único que obtendrás será una tarea más difícil por la rápida evaporación del agua y la baja eliminación de suciedad.
TIPS PARA LA LIMPIEZA DE CRISTALES
- Limpieza detallada
Limpia perfectamente los marcos con agua y jabón, así mismo, elimina la suciedad excesiva de tu cristal, posteriormente aplica sobre un paño algún producto como LIMPIA CRISTALES DAMJ para eliminar la suciedad restante y pasar al secado total de la superficie.
2. El paño adecuado
Utiliza un paño 100% de algodón, con esto evitarás que quede pelusa esparcida por la superficie, así mismo, evitarás daños que puedan causar otro tipo de telas. Si no tienes ningún paño de algodón puedes usar periódico, aunque no abuses de esta actividad ya que podrían manchar de tinta tus cristales.
3. Constancia
Realiza esta actividad de forma periódica y regular, entre más constante seas evitarás la acumulación de grandes capas de suciedad que pueden perjudicar la apariencia de tu cristal.
4. Utensilios correctos
Ten a la mano siempre una cubeta con agua, algún objeto para retirar restos de pintura, yeso o cemento, un banquito o escalera para las partes altas y un paño para el secado que es muy importante.
5. Protege el suelo
Muchas veces los productos limpiacristales suelen ser dañinos para cierto tipo de piso o alfombras, así que, no está de más proteger tu piso con periódico o un trapo que pueda absorber la humedad excesiva.
Finalmente recuerda que los cristales al ser una parte más de tu hogar merecen el mismo trato y cuidado que el resto de tu hogar. Los cristales limpios son el reflejo de un hogar impecable.